Cómo ser María Cañas o una homo videns compulsiva
María Cañas, que nos acompañará en la Mostra con una video instalación y una masterclass, se acerca al Blog del (S8) para responder a nuestras preguntas. Esperamos que las disfruteis.
Cómo ser María Cañas o una homo videns complusiva
– María Cañas se autoproclama La Archivera de Sevilla, caníbal audiovisual, coleccionista, peliculera, cibergarrulla, salvaje mediática, iconoclasta, pervertidora, buñuelista, zensualista, mitómana, peliculera… pero, desde luego, algo que haces son contínuas operaciones fílmicas…en ese eterno cortar y pegar, cuánto de bisturí debe tener la mirada. ¿Te sientes cirujana?.
Sí, cirujana iconoclasta, violadora de imágenes, caníbal punk, doctora Franskenstein, alquimista del detritus audiovisual… Soy incómoda para los directores de cine y fotografía puristas, me ven como alguien que corta en pedazos su trabajo.
Uso materiales de archivo y residuos reciclados como forma de construcción cinematográfica viva. Mi pasión es el cine realizado con pocos medios pero sin límites.
– Ver lo creado + deconstruirlo + volver a crear = ¿ver y crear van de la mano en María Cañas?.
Me considero una homo videns compulsiva. Crear, para mí, es una cuestión de salud mental, un exorcismo personal. Una necesidad profunda de mis tripas y mi alma.
Siempre nos quedará la poesía para construir y destruir el universo.
Una frase de Bukowski que me repito continuamente como un mantra: “Cuando
todo se iba al carajo, siempre estaba la poesía para salvarme el culo”.
– Como iconoclasta, ¿recuerdas el momento en el que sentiste que eso era así ?
El momento adolescente en que la ciudad en la que nací y vivo, Sevilla, me intentó engullir en su folklorismo dogmático, excluyente y radical.
Yo sin embargo, sentía como Arthur Cravan que: “Soy todas las cosas, todos los hombres y todos los animales”.
Y tomé conciencia de que se puede habitar en otra imagen, refugiarse, vivir en ella. El canibalismo iconográfico lo concibo como un arma revolucionaria, reveladora de fantasmas.
Me interesa evitar las dicotomías demasiado evidentes y posicionarme ante las cosas con una cierta desconfianza ante la prepotencia de la especie humana y de una forma desinhibida y fresca, como los niños.
– La base conceptual de tu trabajo parte de decir que de lo que ya existe (de lo que ya está creado) se puede aprovechar todo. ¿Cuál es el siguiente paso?
Ahora siento que el reciclaje llevado al infinito es agotador, aniquilador.
El siguiente paso es tirar todo a la basura y respirar profundamente. Estar en este mundo sin ser de este mundo.
Vivo acompañada por los fantasmas de los espíritus libres y visionarios de Duchamp, Cravan, Morrison, Artaud, Buñuel, Bacon… y me están seduciendo continua y dulcemente.
Me ha llegado el momento de descansar junto al profeta:
«En esta basura pétrea, ¿qué raíces prenderán?, ¿qué ramas crecerán? hijo de hombre, no lo puedes decir ni adivinar, pues sólo conoces un montón de imágenes rotas donde golpea el sol». T. S. Elliot.
– Qué siginifica para ti la periferia / el cine periférico?
Otro cine es posible, distinto al de las salas comerciales. Otros caminos para emocionar.
El cine periférico es un espacio ilimitado de libertad y poesía. Permite infinitas heterodoxias en el contenido y en la forma, sobre nuestro palimpsesto de imágenes podemos releer, cuestionar, explorar, remontar, transformar el mundo una y otra vez.
– En tu trabajo aparecen recurrentemente imágenes del cine de Hollywood. ¿Qué hay de placentero al poder convertir en periférico/ periferia algo que en su inicio no lo fue?
Hacerle un corte de mangas a Hollywood gracias a la Serie B, la iconoclastia y el reciclaje es para mí un gran placer. Disfruto con el remake y la relectura de la tradición y tópicos cinematográficos.
Padecemos una sobreabundancia de imágenes. La economía de Hollywood produce una inflación tremenda. Por eso, para crear, elegí reciclar, revisitar, reprogramar obras ya existentes, homenajear los recursos de una gran industria y el infinito iconográfico de nuestra sociedad. Ha llegado el momento de filmar lo que nadie filma y donde nadie filma o de hacer cine sin cámaras.
– Al comienzo de “ Down With Reality” planteas la siguiente pregunta: ¿qué sucede cuando alguien con un talento enorme decide no ser una super estrella?….¿qué sucede, María?….¿se convierte en periférico?
Ay (suspiro profundo) hay tantos interesantes Bartlebys artistas anónimos no reconocidos…
– Animalario TV es todo un referente entre la gente que se dedica a crear cine de no ficción. ¿Esperábais esta respuesta cuándo se puso en marcha?
Sí, la verdad, y no pienso que esto suene pretencioso. Es lo que suele ocurrir cuando crees en algo con tanta fé, te entregas a ello en cuerpo y alma con pasión e intuyes que darás pistas, motivación, alegría, poesía a otros, y además trabajas duro y con generosidad.
– Desde Goya a Andrés Serrano pasando por Haneke, son muchos los creadores que buscan crear imágenes que pongan en tela de juicio la mirada del espectador ante sí misma. Consumir violencia, no es lo mismo que observarla. ¿Bajo que principios se encuentran trabajos tuyos como por ejemplo los cinco capítulos que conforman LA COSA NUESTRA?
Personalmente no me interesa practicar la violencia porque me destruye. Intento sublimarla con la creación y consumo artísticos, la amistad, el yoga, la meditación y el deporte.
Pero la historia de la violencia formará parte del universo desde sus orígenes hasta su extinción. Y yo sólo muestro algunos ejemplos de violencia en reflexiones y visiones audiovisuales.
La Cosa Nuestra muestra otras lecturas de la fiesta nacional, desmitificándola.
En ella, diversión y tremendismo operan en el canibalismo iconográfico.
Su iconoclasta sentido del humor, va desgranando las relaciones que se establecen entre el toro, otros bóvidos y el hombre en diversas culturas.
Practico una cinefagia militante construyendo un delirante discurso que utiliza como base dos animales ancestrales, el cerdo y el toro, típicamente enraizados en nuestra idiosincrasia. Son escogidos por su influencia en nuestro imaginario colectivo, con la intención de subvertir los tópicos e ironizar sobre elementos de la cultura popular.
– Orlan, posiblemente sea uno de los mayores exponentes en la Historia del Arte a la hora de abordar los “cánones estéticos” como temática en sus piezas. A ella ya le han prohibido operarse más. Orlán ha llegado a su última imagen. ¿Cómo valoras este hecho?. ¿Cuál es tu visión de alguien que es capaz de operar(se) para encontrar la imagen última?
Orlan es extrema y la admiro, pero no sé si encontrará o soportará esa última imagen del monstruo.
Personalmente para sentirme plena prefiero concebir mi cuerpo y mi mente como un templo a los que intento sanar, como el universo, sin límites ni tiempo.
Las modas me la repantinflan. Me interesa ser, no tener.
Comulgo con Joel Peter Witkin en su concepción del arte: «La historia del arte es la historia de la evolución del espíritu humano. El arte debe ser una meditación sobre la vida.».
Y con Hanna Höch: “ Me gustaría borrar los límites fijados que a los humanos, seguros de nosotros mismos, nos gusta dibujar alrededor de cualquier cosa que podemos conseguir”.
Final:
– María Cañas, mil gracias porcinas por atender a la Editorial del Blog del (S8). Nos vemos en la Cárcel de A Coruña en Junio. Para finalizar me gustaría proponerte un juego:
Como archivera, audiovisual, coleccionista e iconoclasta…marca las seis diferencias que guardas en tu retina entre: “ la salida de la fábrica” de los Lumiere y “ la salida de la fábrica” de las trabajadoras de Inditex.
Muchas gracias a vosotros, sí, nos vemos en el talego con el cine experimental. Sería emocionante hacer un pase para todas las personas privadas de libertad.
Respecto a las diferencias entre “la salida de la fábrica” de los Lumiere y “la salida de la fábrica” de las trabajadoras de Inditex siento la misma mierda de siempre, pero hoy con un envoltorio más crudo y menos poético.