Ernie Gehr. Aquí no hay blockbusters, solo expansores de la mente.
por Manohla Dargis
Hay múltiples adjetivos que encajan con el trabajo fílmico y digital de Ernie Gehr: abstracto, hermoso, misterioso, vigorizante, utópico. Una obra que también puede ser evasiva: ¡eso no es malo! Su película de 14 minutos History (1970), por poner un ejemplo extremo, consiste mayormente de lo que parece en una centelleante mancha negra y gris que trae a la mente la alucinación del cielo de una noche en el desierto, como van Gogh de tripi, Lo que estás mirando, y posiblemente en lo que te estás perdiendo, no es una representación de algo fuera de la cámara, sino la película en sí misma: las nubes tintadas de película a color y el grano arremolinado en blanco y negro que componen la imagen que ves. info